Este xilófono de animales salvajes será uno de los mas amados por tus hijos. Los xilófonos son instrumentos de percusión que se encuentran compuestos por un conjunto de barras resonantes de diferentes longitudes. Se consigue un sonido gracias al golpeteo de las barras con dos baquetas de punta esférica. El xilófono se toca golpeando las láminas con palos, macillos o baquetas, como si fuese un tambor. Por eso es un instrumento de percusión. Permite desarrollar las siguientes habilidades:
- Estimula el sentido rítmico. Al igual que otros muchos instrumentos musicales, dejar que nuestros niños jueguen y se entretengan con este juguete les estimulará el sentido rítmico. Podemos potenciarlo si, además, nosotros tocamos otro instrumento o simplemente les enseñamos alguna canción.
- Favorece los movimientos ágiles. El xilófono requiere agilidad y destreza. Si dejamos que utilice este juguete, se dará cuenta de que, cuanto más rápido vaya, mejor sonará. Así que tu hijo o hija intentará ir todo lo rápido posible para conseguir el máximo sonido. Esto hará que sea capaz de realizar movimientos más ágiles.
- También es maravilloso para estimular la coordinación óculo-manual. Así consigue ser capaz de mejorar la relación de sus manos con sus ojos. Verá la tecla a la que quiere golpear y sus manos irán directas.
- Ayuda a favorecer la capacidad de concentración. Es importante que le administremos una rutina que le ayude a concentrarse.
- También permite que descarguen energía, algo realmente importante a edades tempranas. Así, se encontrarán más cansados luego y descansarán mejor.
- Podemos utilizar el xilófono como un refuerzo para el reconocimiento de los colores.
Para niños mayores de 1 año de edad